Arsénico en el agua potable: un enemigo silencioso

El arsénico es un elemento de origen natural presente en la corteza terrestre, que puede disolverse en el agua al fluir a través de determinadas formaciones rocosas, llegando a contaminar acuíferos subterráneos, arroyos o ríos, que a menudo son fuentes de agua potable. La presencia de arsénico en el agua potable representa un riesgo significativo para la salud pública, debido a su toxicidad y a los graves efectos adversos que puede causar a largo plazo. Este artículo ofrece una evaluación técnica detallada de las fuentes, impactos y estrategias de mitigación del arsénico en el agua potable.

Fuentes de contaminación por arsénico

Las fuentes de contaminación de arsénico en el agua potable pueden ser tanto naturales como antropogénicas:

1. Fuentes naturales
   - Erosión de minerales y rocas: el arsénico se libera en el agua subterránea y superficial debido a la disolución de minerales arsenopiríticos y otras formaciones geológicas que contienen arsénico.

   - Actividades hidrotermales: las áreas geotérmicas pueden liberar arsénico en el agua a través de actividades volcánicas y fuentes termales.

2. Fuentes Antropogénicas
   - Actividades mineras y metalúrgicas: la minería y la fundición de metales liberan arsénico en el ambiente mediante residuos y efluentes.
   - Uso de pesticidas y herbicidas: algunos pesticidas y herbicidas contienen compuestos de arsénico, que pueden infiltrarse en las fuentes de agua.
   - Desechos industriales: la eliminación inadecuada de desechos industriales que contienen arsénico puede contaminar las fuentes de agua.

Distribución geográfica de la contaminación

La contaminación por arsénico en el agua potable varía significativamente según la región:

   - Asia: Bangladesh, India, Nepal y Vietnam enfrentan niveles extremadamente altos de arsénico en las aguas subterráneas. En Bangladesh, se estima que más de 20 millones de personas están expuestas a niveles de arsénico superiores a los recomendados por la OMS.

   - América Latina: México, Argentina y Chile tienen regiones con alta contaminación por arsénico debido a factores geológicos y actividades mineras.

- Estados Unidos: Estados como California, Nevada y partes del Midwest enfrentan desafíos significativos respecto a la presencia de arsénico en el agua potable.

Impacto en la salud

La exposición prolongada al arsénico a través del agua potable está asociada con una serie de problemas de salud graves. Los efectos adversos varían dependiendo de la concentración y la duración de la exposición:

   - Cáncer: el arsénico es un carcinógeno humano confirmado, asociado con cáncer de vejiga, pulmón, piel, riñón, hígado y próstata.
   - Enfermedades cardiovasculares: la exposición crónica al arsénico puede llevar a hipertensión, arteriosclerosis y otros problemas cardiovasculares.
   - Diabetes: estudios han mostrado una relación entre la exposición al arsénico y la incidencia de diabetes tipo 2.
  - Efectos neurológicos: la exposición al arsénico puede causar daños neurológicos, incluyendo deterioro cognitivo y neuropatía periférica.
    - Otros efectos: engrosamiento y decoloración de la piel, dolor estomacal, náuseas, vómitos, diarrea, y trastornos en el sistema reproductor, nervioso, inmunitario, hepático, pulmonar o cardíaco.

 

Estrategias de mitigación

La remediación del arsénico en el agua potable requiere una combinación de enfoques tecnológicos y estrategias de gestión. Entre las tecnologías de tratamiento más efectivas se encuentran:

1. Adsorción
   - Alúmina activada: utiliza óxido de aluminio para adsorber el arsénico, particularmente eficaz para el arsénico en su forma pentavalente (As(V)).
   - Hidroxiapatita y carbono activado: otros materiales adsorbentes que han mostrado efectividad en la eliminación de arsénico.

2. Ósmosis Inversa (RO):
   - Mecanismo: este método utiliza una membrana semipermeable para eliminar el arsénico y otros contaminantes del agua. Es altamente eficaz, pero puede ser costoso y requiere un mantenimiento regular.

3. Precipitación y Coagulación:
   - Proceso: utiliza coagulantes como sales de hierro o aluminio para formar precipitados que arrastran el arsénico durante la sedimentación. Este método es económico y ampliamente utilizado en plantas de tratamiento de agua.

4. Intercambio iónico:
   - Resinas aniónicas: utiliza resinas de intercambio iónico para sustituir los aniones de arsénico por aniones benignos en la resina.

5. Filtración biológica:
   - Filtros de bioarena: utilizan microorganismos presentes en la capa biológica del filtro para remover arsénico. Es una solución de bajo costo y sostenible para comunidades rurales.

 

Pautas para el uso del agua contaminada con arsénico

La Agencia de Protección Ambiental de los EE. UU. y otros organismos de salud han establecido directrices específicas para el uso del agua contaminada con arsénico en función de sus niveles:

- Por debajo de 10 ppb (0.010 ppm): el agua puede utilizarse para todos los usos domésticos.
- Entre 10 y 35 ppb (0.010 y 0.035 ppm): no se recomienda su uso para beber, cocinar o lavar alimentos. Se sugiere usar una fuente alternativa para estos fines.
- Entre 36 y 99 ppb (0.036 y 0.099 ppm): no se debe usar para beber, cocinar, ni para dar de beber a mascotas. Puede usarse para otros usos domésticos.
- Entre 100 y 499 ppb (0.100 y 0.499 ppm): no se debe usar para beber, cocinar, lavar alimentos ni para regar jardines a largo plazo.
- 500 ppb y más (0.500 ppm y más): no se debe usar para ningún uso doméstico.

 

Políticas y regulaciones

La implementación de políticas y regulaciones rigurosas es esencial para gestionar y mitigar la contaminación por arsénico en el agua potable. Algunas recomendaciones incluyen:

- Establecimiento de Límites Máximos Permitidos: la OMS recomienda un límite máximo de 10 μg/L (10 ppb) de arsénico en el agua potable, y es crucial que los gobiernos adopten y hagan cumplir estos estándares.
- Monitoreo y vigilancia continuos: los gobiernos deben establecer programas de monitoreo regulares para detectar y evaluar los niveles de arsénico en las fuentes de agua.
- Educación y concienciación pública: informar a las comunidades sobre los riesgos del arsénico y las medidas de mitigación puede empoderar a las personas para proteger su salud.
- Financiación y apoyo técnico: proveer financiamiento y apoyo técnico para la implementación de tecnologías de tratamiento en comunidades afectadas.

 

Conclusión

La contaminación por arsénico en el agua potable es un problema complejo que requiere una combinación de estrategias científicas, tecnológicas y de políticas públicas para ser abordado eficazmente. La colaboración entre gobiernos, instituciones científicas y comunidades afectadas es crucial para desarrollar soluciones sostenibles y proteger la salud de millones de personas en todo el mundo. A través de una gestión integrada y un enfoque basado en la evidencia, es posible mitigar los efectos adversos del arsénico y asegurar el acceso a agua potable segura y limpia.

 

MAS INFORMACIÓN EN:

https://www.oregon.gov/oha/PH/HEALTHYENVIRONMENTS/DRINKINGWATER/MONITORING/Documents/health/arsenico.pdf